El dolor de espalda es el primer problema de salud crónico en España, alrededor de un 80% de la población española sufre dolor de espalda en algún momento de su vida, debido al tipo de vida que llevamos, cada vez más sedentaria por motivos laborales o personales.
Este dolor puede provocar limitaciones en las actividades de la vida diaria, llegando a causar hasta incapacidad temporal. Según los datos de que disponemos, hasta el 40% de los casos de dolor de espalda se han visto obligados a pedir una baja laboral.
¿Es posible prevenir o disminuir el dolor de espalda? Por supuesto, para ello es imprescindible hacer ejercicio, evitar el sedentarismo en la medida de lo posible y cumplir unas normas de higiene postural, algo que la mayoría de la población desconoce y en lo que en Kinesia somos especialistas.
¿Cómo puede ayudar el ejercicio físico a mejorar el dolor de espalda? Realizar ejercicio activo de forma regular, gradual, controlado y progresivo para la espalda, ayuda a la distribución de los nutrientes del espacio intervertebral y los tejidos blandos de la misma, por lo que es una gran herramienta para mantener discos intervertebrales, músculos, ligamentos y articulaciones sanos, evitando la rigidez y la debilidad musculo- esquelética que es la que termina derivando en el dolor de espalda.
¿Qué tipo de ejercicio es bueno para mantener una espalda sana? Un entrenamiento completo de espalda debe combinar ejercicios de elongación, de fortalecimiento y aeróbicos de bajo impacto. Se recomienda realizar este tipo de ejercicios como mínimo una hora dos días por semana, ya que se ha observado que este entrenamiento puede reducir el dolor subjetivo de espalda hasta en un 41,6%.
En resumen, el ejercicio físico es absolutamente imprescindible como herramienta para evitar en la medida de lo posible y mejorar el dolor de espalda existente. Asimismo, te damos a continuación una serie de consejos para que tengas muy en cuenta a la hora de cuidar tu espalda y no sufrir dolor:
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- Atención al manejo de cargas: repartir los pesos que cargamos de forma equitativa.
- Buena higiene postural: Agacharse flexionando las rodillas y mantener una posición erguida.
- Si tu trabajo es sedentario, intenta levantarte al menos una vez cada hora que estés sentado.
- Come de forma saludable, una buena alimentación es vital para una musculatura sana.
- Lleva a cabo una buena hidratación, bebe al menos dos litros de agua al día.
- Controla tu peso, el sobrepeso es muy perjudicial para la salud de tu espalda.
- Elige el calzado adecuado, revisa tu pisada con un especialista.
- Cuida tu boca mediante revisiones anuales al dentista, aunque suene extraño, la dentadura y la espalda tienen una estrecha relación.
- Realiza ejercicio de forma regular, siempre con el consejo de un profesional y sin excesos.
¡Cuida tu cuerpo, es donde vives!
Escrito por: Irene Simón
Entrenadora polivalente y entrenadora personal
Kinesia Health & Sport